La operación “Cruz del Sur”, protagonizada por el rompehielos ARA Almirante Irízar de la Armada Argentina, cumplió este año su vigésimo tercero aniversario, tras llevar a cabo el rescate del buque alemán “Magdalena Oldendorff”, que quedó atrapado entre los hielos de la Antártida en 2002 mientras intentaba replegar personal de bases rusas. El operativo, catalogado de altísimo riesgo por la severidad de las condiciones climáticas y el grosor del hielo marino, se convirtió en un hito de la capacidad naval argentina en el continente blanco.
Durante la operación, se estableció la Bahía Muskegbukta como refugio seguro para el barco alemán y su tripulación —compuesta por 79 científicos rusos y 28 tripulantes— con el objetivo de evitar su deriva en los témpanos. Este rescate no sólo fortaleció la soberanía argentina en la Antártida sino que dejó legados institucionales: el museo antártico rememora la misión y los medios logísticos y humanos desplegados constituyen un referente para futuras campañas en regiones extremas.




Comentarios recientes