Bienvenidos a Ushuaia, la joya del Fin del Mundo, donde el espectador ávido de paisajes impresionantes es recibido con una fastuosa exhibición de… chatarra.
Sí, en nuestra querida ciudad eminentemente turística, nada dice «destino de ensueño» como un esparcimiento meticuloso de vehículos oxidados y artefactos olvidados justo en la calle Héroes de Malvinas, el grandioso portal de ingreso a nuestro paraíso austral.
Porque, claro, nada complementa mejor las majestuosas montañas y los cristalinos mares que los vestigios de tecnológicas eras pasadas. Una adición visual que seguramente confunde a los turistas al pensar que han llegado al mágico reino del reciclaje creativo.
En fin, nada como un toque de ironía urbana para contrastar con la belleza prístina de la ciudad que se promueve como uno de los destinos más espectaculares del planeta.
Bienvenidos, y ojo con los bordes oxidados.