El peronismo, bajo el frente Fuerza Patria, se impuso con amplitud en la provincia más poblada del país. Ganó en seis de las ocho secciones electorales y superó a La Libertad Avanza por 13 puntos. El revés golpea a la Casa Rosada de cara a los comicios nacionales del 26 de octubre.
El gobierno de Javier Milei sufrió una derrota contundente en las elecciones legislativas de la provincia de Buenos Aires, donde se concentra más del 37% del padrón nacional. El frente Fuerza Patria, que nuclea a sectores referenciados en Axel Kicillof, Cristina Kirchner y Sergio Massa, se impuso por 13 puntos en el distrito clave.
Con el 83% de las mesas escrutadas, la fuerza peronista alcanzaba el 46,93% de los votos, mientras que La Libertad Avanza quedaba en segundo lugar con el 33%. Más atrás se ubicaron Somos (5,41%), la izquierda (4,37%), Potencia(1,41%) y Unión Libertad (1,34%).
El resultado fue categórico: el PJ ganó en la primera y la tercera sección electoral, las más pobladas e influyentes del conurbano bonaerense. También se impuso en la cuarta, la séptima, la segunda y la octava, consolidando un dominio territorial que dejó sin margen de reacción al oficialismo nacional.
La jornada se vivió con especial expectativa en la Casa Rosada, que apostaba a un desempeño competitivo en la provincia para oxigenar la campaña presidencial. Sin embargo, el retroceso resultó más duro de lo previsto y dejó al Presidente con menor capacidad de proyección hacia los comicios del 26 de octubre.
La batalla central se dio en la circunscripción del norte y oeste del conurbano, donde el ministro bonaerense Gabriel Katopodis encabezó la lista de Fuerza Patria. Allí derrotó a Diego Valenzuela, intendente de Tres de Febrero y candidato de LLA. “Es un freno a Milei”, sostuvo Katopodis tras confirmarse la victoria.
La derrota bonaerense se suma a un recorrido electoral irregular de La Libertad Avanza en las provincias. En lo que va del año, logró imponerse en la Ciudad de Buenos Aires y en Chaco, en alianza con el radical Leandro Zdero. Pero terminó segunda en Jujuy, Salta y Misiones, tercera en Santa Fe y Formosa, y cuarta en Corrientes. Ahora, el traspié en Buenos Aires —el distrito más decisivo del país— agrava la situación del oficialismo.
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